Respiración
Doble movimiento necesario para la vida análogo al aspir-expir universal, o sea, a las dos corrientes cósmicas presentes en la creación. Comunicación entre el microcosmos y el macrocosmos. → Soplo → Ank.
Damos aquí un ejemplo de un ejercicio respiratorio muy sencillo:
a) Siéntese cómoda y correctamente. Así usted lo haga a la oriental (con las piernas cruzadas debajo de las asentaderas), o a la occidental (rectamente en una silla), es muy importante conservar la vertical.
b) Una vez relajado, cierre sus ojos e imagine un círculo, con su punto central destacado y su circunferencia. Mejor aún, si es posible construya previamente esta figura en papel, cartón u otro material y obsérvela fija y atentamente durante algunos minutos. Luego, con los ojos cerrados, proyéctela sobre un fondo imaginario. Concéntrese alternativamente sobre el punto central y la circunferencia. Sienta poco a poco el fluir de su respiración.
c) Figúrese que es usted el punto central de una circunferencia gigantesca. Ese círculo es una esfera, y usted es el centro y el eje de ella. Con su respiración ella se contrae y se dilata, desciende y asciende la energía, y se oscurece y aclara esa esfera al ritmo respiratorio.
Tómense entre 15 y 30 minutos en total para efectuarlos. No es conveniente fatigarse. No se ponga demasiado eufórico o se desanime por los resultados obtenidos. La persistencia diaria es necesaria y el mejoramiento en este entrenamiento es progresivo.
Así como otro algo más complejo:
En las mismas condiciones en que hemos efectuado los ejercicios anteriores y los que seguirán, realizaremos ahora una práctica nueva: usted ya se ha familiarizado con una respiración simple de dos fases (aspiración-expiración). Ahora subdividiremos este ciclo en cuatro. Asimismo, usted se ha acostumbrado a producir tanto la aspiración como la expiración en un determinado lapso igual de tiempo (4, 6 u 8 pulsaciones, etc.). Trate de hacer este ejercicio que damos a continuación otorgando a cada una de las cuatro fases el mismo número de pulsaciones ya elegidas. Veamos el siguiente diagrama:
Aspire en 1, retenga el aire en 2, expírelo completamente en 3 y quede con los pulmones totalmente vacíos en 4, hasta que tenga necesariamente que volver a aspirar en 1. Mantenga el ritmo durante 15 ó 20 minutos. El secreto de este ejercicio es expulsar todo el aire sin que nos quede nada en los pulmones. Esta respiración es la que sugerimos para los próximos ejercicios, por lo que sería muy práctico poder realizarla.