Cerdo
Según Horapolo en su Hieroglyphica, cuando los egipcios querían pintar un hombre depravado pintaban este animal, porque la naturaleza del mismo es tan bestial que come hasta sus propias crías con voracidad. En el lenguaje popular subsiste esta acepción a la que hay que agregarle la de sucio. Incluso también pensaban que Tifón, un dios perpetuamente en guerra con Osiris y que representa el viento del desierto, lo que es para ellos una calamidad, se le equiparaba.
Este tabú sobre el cerdo se traslada a sus carnes y por ese motivo en numerosos pueblos se prohíbe su ingestión. En la India también está prohibida (como toda carne) pero los crían para que les sirva de artefacto del hogar; en efecto, aspiran todos los desperdicios y de esa manera dejan todo inmaculado, papeles incluidos. Hay que tener cuidado con los niños.
Para los chinos, junto con los peces, son los animales más tontos y despreciables de la creación.
2. Por otra parte las cerdas tienen una importancia grande en Grecia y Roma. Se ofrendaban cerdas preñadas en los cultos de los Mysteria a Deméter-Perséfone (Pelarge), como igualmente, en Roma, según la Eneida el lugar de la fundación de Alba Longa (antiguo nombre de Roma) fue señalado por una cerda blanca igualmente parturienta.
En la Tradición Celta se habla de un animal mágico con forma de cerda: Henwen, aunque monstruoso. → Osa-Jabalí.
Llama la atención el color blanco de estos animales, aunque es el color de muchas ciudades y animales emparentados con ellas, v. gr. Aztlán con una garza blanca → Garza.
Cerdo
Hieroglyphica, Horapolo