Intelectual
La auténtica intelectualidad no está ligada al conocimiento de verdades siempre perecederas, sino a las distintas expresiones en que se manifiestan las ideas o la idea del Ser y del No-Ser. Es decir, de lo Uno y de lo Otro, que ha sido la enseñanza tradicional –y dual– de todos los pueblos entre dos polos opuestos que se conjugan siempre en la unidad del centro del que proceden.
Hay mucha confusión en cuanto a lo que el término intelectual o intelectualidad se refiere. Tal vez a personajes intelectuales exitosos como Borges, o yo mismo, capaz de entrever la esencia del misterio y el secreto y verterla impúdicamente sobre la hoja de papel. Y es notorio también que diciéndose aquí lo que se dice de renunciamiento, se siga pensando en algún premio profano que se pudiera obtener mediante estas líneas, ya sea económico o referido a cualquier poder al que se pretendiese aspirar.
Por lo que sugerimos se retiren aquellos que no están dispuestos a comprender con el corazón lo enunciado.
El verdadero intelecto es una energía capaz de transformarlo todo debido a la fuerza de esa misma idea, generativa de un lenguaje, que a su vez pueda ser repetido mediante la potencia desprendida de la piedra imán.
Otra cosa es la Intuición Intelectual, o "el tercer ojo" para los hindúes, que nos da la certeza.