Hermópolis (greco-egip.)
Ciudad situada en el Alto Egipto es de sumo interés para todos aquellos que estudian la Tradición Hermética y la metafísica de Platón.
Su dios patrono era Thot, o Hermes, inventor del lenguaje y escriba sagrado que se comunicó con sus alumnos en una especie de recitado o tarareo musical iniciando así a genios y dioses, de los que señala Mario Meunier, no suelen dedicarse a la inactividad.
La Tradición de esta ciudad señala una y otra vez la tríada Osiris (el Nilo y su valle) como el punto producido por la base femenina, Isis, que busca desesperada y permanente a su esposo y origen, despedazado por la energía de Tifón (el viento del desierto), y juntando perennemente sus pedazos para recomponer la figura del triángulo, del cual su hijo Horus es la hipotenusa.
Pero esta descripción no es exclusivamente naturalista. Por lo contrario los fenómenos naturales no hacen sino expresar los principios metafísicos, también impresos en el hombre por sus pasiones y por la lucha constante por restaurar el orden y librarse del enemigo, constatado por la energía ejemplarizada en Tifón. Plutarco, siguiendo a Platón, no deja de señalarlo en su libro, Los Misterios de Isis y Osiris, (traducción de Mario Meunier, siguiendo en muchos aspectos los comentarios de Maspero).
Ruinas de Hermópolis Magna, Alto Egipto