Discípulo
Quien sigue las enseñanzas del maestro intelectual, las hace suyas, las vive como tales, y a su vez las transforma, haciéndolas nuevas, siempre a la luz de la doctrina unánime, que participa del hilo de oro y los autores e ideas que la expresan en todos los lugares y tiempos, lo que garantiza que la Tradición se perpetúe y lo haga partícipe de tamaño honor y responsabilidad, permitiéndole a su vez que al encarnarla, pueda igualmente transmitirla –en forma escrita o no–, de acuerdo a las capacidades con que está dotado y las formas personales en las que tiene facilidad y son las adecuadas para su tiempo y lugar, es decir, con lo que cuenta.
Maestro impartiendo enseñanzas. Códice Florentino.