DICCIONARIO DE SIMBOLOS Y TEMAS MISTERIOSOS
Federico González Frías

DICCIONARIO

Zodíaco-Zodiacal

Rueda de la Vida (de zoe, vida y diakos, rueda), o sea, del movimiento. Otra versión la emparenta con la Rueda de los Animales, variando la interpretación de zoe por zoo (animal), recordando que muchos de los signos que representan las doce divisiones de la Rueda Zodiacal son animales en los calendarios de los pueblos tradicionales.

Esta división está en relación con la del año en 12 meses de 30 días. También al ciclo de la precesión de los equinoccios de 25.920 años (26.000 en números redondos como en la Tradición Precolombina) se lo divide en 12 períodos de 2.160 años durante los cuales se retrocede un signo del zodíaco pues su movimiento es retrógrado.

Los doce signos son hoy para nosotros herederos de la astronomía caldea: Aries, Tauro, Géminis, Cáncer, Leo, Virgo, Libra, Escorpio, Sagitario, Capricornio, Acuario y Piscis que corresponden cada uno a 30° de la superficie de la circunferencia, haciendo la salvedad de que para muchos pueblos el año comenzaba en el equinoccio de primavera y no como hoy en el solsticio de invierno.

Zeus lanzando el rayo. Bronce, Dodona.
Signos del Zodíaco. Andrés de Li, Repertorio de los tiempos, Zaragoza, 1495
Zeus Tonante, extraída del archivo de imágenes del Warburg Institute.
El Zodíaco y el cuerpo humano. Andrés de Li,
Repertorio de los tiempos, Zaragoza, 1495

Se debe considerar en esta división en doce la presencia del cuaternario compuesto de tres signos cada uno y que se emparenta con los elementos: fuego (Aries, Leo, Sagitario), aire (Géminis, Libra, Acuario), agua (Cáncer, Escorpio, Piscis) tierra (Tauro, Virgo, Capricornio), sucesivamente y con movimiento rotatorio.

La división de la circunferencia, o sea del número trescientos sesenta se ha hecho de muchas maneras y hay zodíacos de 6, 8, 10, e incluso de dieciocho meses de veinte días, como es el caso de los calendarios mesoamericanos, donde curiosamente hay en todos ellos signos animales. Todas las Tradiciones conocidas han tenido ruedas zodiacales que les servían para el cómputo de los fenómenos astronómicos.

Según el Sefer Yetsirah las tres letras madres (Alef, Mem, y Shin), equiparadas a los Princi-pios Universales, abren a las siete dobles (Beth, Guimel, Daleth, Kaf, Fe, Resh y Taw) vinculadas a los siete planetas y todas ellas a las doce simples (Hé, Vav, Zayin, Heth, Teth, Yod, Lamed, Nun, Samekh, Ayin, Tsade y Qof), figuradas por los doce signos zodiacales, conformando todo ello a Teli, el Dragón Celeste, o Ser Universal, según la traducción del Sefer Yetsirah debida a Arieh Kaplan.