DICCIONARIO DE SIMBOLOS Y TEMAS MISTERIOSOS
Federico González Frías

DICCIONARIO

Isis (egip.)

La diosa egipcia que representa a la gran madre, es la esposa de Osiris y la madre de Horus. Se la suele representar con cuernos y el disco solar entre ellos; asimismo como mujer con cabeza de vaca, escorpión o leona, sobre ella el trono; también como fémina alada con asimilaciones con Mut y Hathor. Osiris está asociado con la constelación de Orión y ella con Sothis (Sirius). En verdad el nombre sería Ast que quiere decir trono, e Isis es su traducción al griego arcaico, según parece.

Isis. Museo del Louvre, París.
Isis. Museo del Louvre, París

Protagoniza mitológicamente una de las más grandes historias de amor y su mito llegó a ser importantísimo en el mundo griego y romano, siendo recogido por Plutarco.

Osiris, rey del mundo, enseñó a los hombres las artes y las ciencias, pero era envidiado por su hermano Set, el que lo asesina y despedaza su cuerpo arrojando sus fragmentos al río Nilo. Isis ayudada por Thot busca los trozos por todo el reino juntando los pedazos dispersos. Asistida igualmente por Anubis realiza esta operación; aunque no es capaz de encontrar el falo, comido por un pez. No obstante por medios mágicos un pájaro reanima a su esposo y la diosa queda embarazada de su hijo Horus, conformando de modo conjunto la más grande tríada egipcia. Su culto después del período ptolemaico se extendió por todo el Mediterráneo como Diosa Primordial idéntica a Deméter aunque más tarde se la confunde con Afrodita; reina con toda su carga de fecundidad que la vincula asimismo con la agricultura junto con su paredro Osiris.

Patrona del hogar y madre del mundo su poder generador la ha hecho la diosa de las Tradiciones mistéricas. Apolodoro la equipara a Deméter y a Io. (Biblioteca, II, 3).

[2. Afirma Plutarco en Los Misterios de Isis y Osiris:

Isis es, pues, la naturaleza considerada como mujer y apta para recibir toda generación. Este es el sentido en que Platón la llama 'Nodriza' y 'Aquella que todo lo contiene'. La mayor parte la llaman 'Diosa de infinitos nombres', porque la divina Razón la conduce a recibir toda especie de formas y apariencias. Siente amor innato por el primer principio, por el principio que ejerce sobre todo supremo poder, y que es idéntico al principio del bien; lo desea, lo persigue, huyendo y rechazando toda participación con el principio del mal. Aunque sea tanto para el uno como para el otro materia y habitáculo, se inclina siempre voluntariamente hacia el mejor principio; a él se ofrece para que la fecunde, para que siembre en su seno lo que de él emana y lo semejante a él. Se regocija al recibir estos gérmenes y tiembla de alegría cuando se siente encinta y llena de gérmenes productores. En efecto, toda generación es imagen en la materia de la substancia fecundante, y la criatura se produce a imitación del ser que le dio la vida.

No debe considerarse despropósito que los egipcios sostengan en su mitología que el alma de Osiris es eterna e incorruptible, que su cuerpo es despedazado … por Tifón Seth, y que Isis, errante por todo lugar, le busque y llegue nuevamente a recomponerlo. Efectivamente, el Ser, que es también la inteligencia y el bien, es superior a toda corrupción y todo cambio. (54).]

3. He aquí el himno que Apuleyo pone en boca de Lucio en El Asno de Oro, refiriéndose a su carácter de Gran Madre Universal:

Tú, en verdad santa, perpetua protectora del género humano, siempre generosa en favorecer a los mortales, tú tienes por las tribulaciones de los desdichados un dulce afecto de madre. No hay un día, una noche, ni siquiera un pequeño instante que pase, sin que hayas prodigado tus beneficios, sin que hayas protegido a los hombres en la tierra y en el mar, sin haber alargado tu salvadora mano, después de alejar los embates de la vida. Y con esa mano deshaces la inextricable y retorcida urdimbre de la Fatalidad, aplacas las tempestades de la Fortuna y neutralizas la influencia funesta de los astros. Te veneran las divinidades del cielo, te respetan las del infierno; tú das el movimiento de rotación al mundo; al Sol, su luz; al mundo, sus leyes, con tus pies hollas el Tártaro. A ti responden los astros; por ti vuelven las estaciones, se alegran los dioses, se muestran dóciles los elementos. A una indicación tuya soplan los vientos, se hinchan las nubes, germinan las simientes, crecen los gérmenes. Temen a tu majestad los pájaros que cruzan los cielos, los animales salvajes que van errantes por los montes, las serpientes que se ocultan bajo tierra, los monstruos del océano. Pero yo poseo un pobre ingenio para cantar tus alabanzas, y un reducido patrimonio para ofrecerte dignos sacrificios; no poseo la facundia necesaria para expresar los sentimientos que me inspira tu majestad; no poseo ni mil bocas, otras tantas lenguas, ni un inagotable manantial de infatigables palabras, pero tendré siempre delante de mi imaginación, guardándolos en lo más recóndito de mi corazón, tu rostro divino y tu santísimo numen.

Por su parte, Diodoro de Sicilia reprodujo el epígrafe de una columna el cual dice:

Isis soy, reina de la tierra entera, a Mercurio le debo mi Sabiduría, y nadie puede acabar con las leyes que yo he dictado.

Isis según la descripción de Apuleyo
Isis según la descripción de Apuleyo
Atanasius Kircher, 1652